Nota:
El año pasado (2008) le envié un mensaje al caricaturista Paco Calderón
y entre otras cosas le mencionaba el proyecto para las Fiestas
del Bicentenario que desarrollé en estas páginas. La repuesta no
llegó, pero conservé los textos y me permito reproducir aquí, de
manera parcial, lo relacionado a dicho proyecto. Es evidente que
no fue aprobado y para las Fiestas del Bicentenario no se
realizará, pero creo que es conveniente divulgar la respuesta y
analizar hasta que punto
debe ser totalmente desechada la propuesta.
MAB
Lo que sigue forma parte del mensaje enviado:
La segunda razón
tiene que ver con uno de los temas de su cartón del día de hoy
domingo 8 de junio de 2008.
Usted menciona que, entre otras muy importantes cosas, habría que
consultar a los habitantes del D.F. sobre si: ¿Debe seguir el Zócalo como
Desmádromo? En este sitio web me permití iniciar hace algún tiempo, una
secuencia histórica gráfica de lo que ha sido y lo que realmente
debe representar para nosotros un lugar tan singular como el Zócalo. En la Cuarta
Parte me propuse mostrar para que se ha utilizado en los años
recientes.
Por otra parte, el año pasado tuve la idea de generar una propuesta para el Bicentenario.
Después de todo nada se perdería y consideré que la propuesta le daría
al Zócalo su dimensión real, digna y correcta. Es inconcebible que
todos los días se iza y se arría nuestra bandera nacional y a veces
nuestros soldados
ni siquiera tienen por donde pasar.
Puede darse una breve idea del proyecto al hacer clic aquí
o en la siguiente imagen.
Esta proyecto es
totalmente subterráneo y de ninguna manera modifica la fisonomía
tradicional y actual de la gran Plaza Mayor, hoy Plaza de la Constitución,
por lo que todos los edificios que la conforman podrán ser admirados
y las ceremonias oficiales podrán realizarse como de costumbre. Por
lo mismo no afecta de ninguna manera los reglamentos que rigen para
que el Centro Histórico sea considerado Patrimonio Cultural de la
Humanidad
La propuesta se dirigió por los conductos oficiales a la Presidencia
de la República y fue atendida debidamente. Estuve muy consciente de
las pocas posibilidades de realización del proyecto, pero la verdad
que la respuesta final que recibí de Conaculta me dejó bastante
sorprendido.
Puede verla y ampliarla haciendo clic aquí
Mi pregunta sería:
¿Es posible que una institución como el INAH pudiera rechazar un
proyecto que ampliaría el horizonte de sus excavaciones
arqueológicas y crearía la infraestructura para convertirlo en una
verdadera atracción turística de clase mundial?
Recientemente el
diario Reforma publicó el siguiente artículo, en relación con los
ingresos que percibe el INAH por concepto de boletos vendidos por
acceso a los principales sitios arqueológicos del país, el primer
lugar es Chichen Itza, el penúltimo lugar es el Templo Mayor.
Es evidente que si algún día se
construyera un desarrollo turístico como el propuesto, no
necesariamente como obra del Bicentenario, las posibilidades
turísticas del Templo Mayor crecerían de manera exponencial.
Simplemente quise hacer de su conocimiento tanto mi proyecto, como
mi estrepitoso fracaso como proyectista de desarrollos turísticos.
Gráfica que muestra
los ingresos que percibe el INAH por concepto de venta de boletos de
acceso y servicios prestados a los turistas que visitan sus
principales sitios del país. Oprima en la gráfica para
ampliarla o bien aquí
Muchas gracias por la atención prestada
a este mensaje, quise ser lo más breve posible, pero pienso que no
lo logré.
Un cordial saludo. Ing. Manuel Aguirre Botello.